No. 101 / Julio-Agosto 2017


 

El Jardín Marino


  William S. Burroughs / Brion Gysin

Enrique Juncosa

 



Pocos autores han tenido una influencia tan grande en la literatura y la cultura popular de sus países como el norteamericano William S. Burroughs (1914-1997), conocido, sobre todo, por sus novelas, a la vez visionarias, experimentales y semi-autobiográficas. En París, en un hotelucho del Barrio Latino conocido como el Hotel Beat, conoció a Brion Gysin (1916-1986), poeta, novelista, pintor y fotógrafo de origen canadiense, iniciando allí con él una serie de colaboraciones que durarían de por vida. Burroughs escribió que Gysin era el único hombre a quien había respetado. Gysin, que por su parte consideraba a Burroughs como el mejor escritor de su época, había inventado la técnica del Cut-Up, que consistía en recortar tiras de textos para después reordenarlas aleatoriamente, algo semejante a un collage, y que Burroughs utilizaría en sus novelas más celebradas.

Burroughs había nacido en el seno de una rica familia de Saint Louis (Missouri). En 1932, fue a Harvard para estudiar lo que nosotros llamamos Filología Inglesa. Después, aunque ya sin acabar las carreras, se matriculó en Antropología en Columbia y en Medicina en Viena. Su vida no iba a ser ortodoxa. En 1942, fue reclutado por el ejército, aunque le dieron de baja a los pocos meses. En esa época comenzó su adicción a la heroína, droga a la que estuvo enganchado hasta su muerte. En Nueva York, un año después, Burroughs conocerá a Allen Gisnberg y a Jack Kerouac, forjando con ellos una amistad profunda y duradera. La obra de los tres amigos, los tres autores más conocidos de la llamada Beat Generation, tendría un impacto enorme en la llamada Contracultura de los años 60, continuando hasta hoy.

Burroughs llevó la vida de un nómada, pasando largas temporadas en Ciudad de México, Londres, París o Tánger, antes de volver a su país a mediados de los 70. Trabajaba ocasionalmente, pero también recibía la ayuda económica de su familia. En 1951 y en México, estando ambos borrachos con unos amigos, mató a su segunda mujer, Joan Vollmer, imitando a Guillermo Tell con una pistola. Fue condenado por homicidio, sin que ese fuera su primer problema serio con la justicia. Tampoco fue el último, enfrentándose a varias imputaciones por otros delitos.

La primera novela publicada de Burroughs fue Junkie (1953), año en el que también acabó Queer, novela que no vio la luz, sin embargo, y a pesar de la buena acogida crítica que tuvo la primera, hasta los años 80. En ambas obras narraba de forma novelada su relación con la heroína y el mundo gay en la Ciudad de México. Son novelas de estructura tradicional, pero en las que se exploraban temáticas nuevas. De México, Burroughs marcharía al Amazonas para experimentar los efectos de la ingesta del yagué o ayaguasca. De esta última aventura saldría un libro de cartas entre él y Ginsberg, Las cartas del yagué que fue publicado años después en 1963 y es un clásico de la literatura psicodélica. Como estamos viendo, fueron varios de sus libros los que tuvieron que esperar un tiempo a ser publicados, lo que también fue el caso de la temprana novela de extraño título que escribiera en colaboración con Kerouac, And the Hippos were Boiled in their Tanks, escrita en 1945 y solo recuperada en 2008. Allí los dos amigos narraban en capítulos alternativos, los problemas con la justicia que tuvieron por no reportar un asesinato cometido por uno de sus amigos.

Tal vez la obra más conocida de Burroughs sea El almuerzo desnudo (Naked Lunch) publicada en 1959 y escrita en Tánger, ciudad a la que había llegado en 1954, y en donde volvería a frecuentar a Gysin. Ginsberg y Kerouac, quienes lo habían visitado en la ciudad norteafricana en 1957, lo ayudaron a editarla. El almuerzo desnudo, que fue adaptada al cine por David Cronemberg, fue la primera novela que escribió con la técnica del Cut-Up. El método probó ser increíblemente adecuado para las ficciones de Burroughs, cuya atmósfera futurista y visionaria se mantiene fresca hoy en día, habiendo anticipado un mundo globalizado de grandes corporaciones, grupos mediáticos manipuladores, crimen organizado a gran escala, armamentos de potencia espeluznante, graves problemas ecológicos o fanatismos religiosos y nacionalismos populistas. Todo ello escrito con un lenguaje nuevo y deslumbrante. La novela fue acusada de obscenidad, aunque logrando ganar finalmente el juicio.

En los sesenta, Burroughs publicó una trilogía escrita con la misma técnica del Cut-Up, la llamada trilogía Nova (The Soft Machine, The Ticket that Exploded y Nova Express). Después experimentaría con grabaciones, cine y algunos proyectos con Gysin, quien estuvo vinculado también al mundo de la música, colaborando por ejemplo con el jazzista Steve Lacy. Gysin firmó con Burroughs un libro, The Third Mind (1978), publicado en francés un año antes. Se trata de una obra miscelánea que incluye textos narrativos breves escritos a cuatro manos, poemas de Gysin y una entrevista entre ambos. Gysin también ayudó a Burroughs a editar otros libros como Interzona, una recopilación de textos narrativos breves que suceden en Tánger, y escribió un primer guion cinematográfico no utilizado basado en El almuerzo desnudo. Los dos colaboraron juntos en Let the Mice In (1973), un libro de poemas de Gysin con dos ensayos introductorios, uno de ellos firmado por Burroughs y otro por Ian Sommeville, programador e ingeniero electrónico que habían conocido en el Hotel Beat.

La pintura de Gysin, quien trató a los surrealistas siendo casi un adolescente y al llegar a París, no está muy lejana de la obra de Henri Michaux. Pinta grafismos que rememoran los de las caligrafías japonesas y árabes, dos idiomas que conocía, y también diagramas esotéricos y mágicos. Gysin pintó paisajes áridos y abiertos que remiten a sus años en el Norte de África. Su obra artística más conocida es, sin embargo, The Dream Machine (1962), de la que existen al menos dos versiones, una en el Musée d´Art Moderne de la Ville de París y otra en el Centre Georges Pompidou. Se trata de una obra de arte para experimentar con los ojos cerrados: uno se sitúa junto a un cilindro con luces parpadeantes en su interior que en teoría debería llevar al espectador a un trance de tipo místico, si se concentra en las luces repetidas y su respiración. La obra fue realizada en colaboración con Sommerville. Por otra parte, Gysin publicó relatos y novelas como The Process (1969) y The Last Museum (1986).

Gysin fue un precursor del arte multimedia que domina la escena artística actual. Como Burroughs, a quien interesaron el ocultismo y el misticismo, mantuvo que el origen del arte era mágico. Los dos experimentaron con texto grabado y poemas realizados a base de la permutación de sus elementos. Burroughs también pintó al final de su vida. Uno de sus métodos era disparar contra globos rellenos de pintura que colgaban del lienzo. También utilizó un rollo de pintar cortado que había sido de Gysin, que le parecía algo antiguo y que contenía un mensaje secreto. Gysin vivió en Tánger veinticinco años, antes de que por motivos de salud tuviera que regresar a París. Burroughs, quien le sobrevivió poco más de una década, pasó sus últimos años en Kansas. Cuando se murió ya era un mito. Los dos han sido o fueron reivindicados por gente tan diversa como Laurie Anderson, John Giorno, Mick Jagger o Francesco Clemente.