logo-us.jpg

US Latino Poets en español
Por Xanath Caraza

Copatrocinado Smithsonian Latino Virtual Museum
 

us-66.jpgLucha Corpi es uno de los pilares de la literatura chicana en los Estados Unidos. Su versatilidad y excelencia como escritora la hacen una referencia constante para los que se interesan en la materia y en especial en las escritoras latinas/chicanas.La poesía de Corpi es altamente sensual. Su lenguaje es delicado y coloca cada palabra en un encaje lingüístico que fluye con mucha suavidad y con un ritmo que invita a sentir el viento entre los versos.

No. 66/ Febrero 2014


US Latino Poets en español
Por Xanath Caraza

Copatrocinado Smithsonian Latino Virtual Museum
 

us-66.jpgLucha Corpi es originalmente de México. Tenía diecinueve años cuando llegó a los Estados Unidos como estudiante y esposa a Berkeley en 1964. Corpi es autora de dos poemarios:Palabras de mediodía/ NoonWordsy Variaciones sobre una tempestad/ Variationson a Storm. También es autora de dos libros infantiles bilingües: Where Fireflies Dance/ Ahí, donde bailan las luciérnagas y The Triple Banana Split Boy/El niño goloso. Así mismo Corpi esautora de seis novelas detectivescas: Eulogy for a Brown Angel, Cactus Blood, Black Widow’s WardrobeyDeath at Solstice.Corpi ha recibido numerosos premios y reconocimientos, como el National Endowment for the Arts fellow shipen poesía, el Oakland Cultural Arts fellow shipen ficción, el PEN-Oakland Josephine Miles Award y el Multicultural Publishers Exchange LiteraryAward para ficción y dosInternational Latino Book Awardspor su ficción de misterio.Ha trabajado con la traductora Catherine Rodríguez Nieto por varios años. Actualmente Lucha Corpi reside en Oakland, California.

-------------------------------

 

Lucha Corpi es uno de los pilares de la literatura chicana en los Estados Unidos. Su versatilidad y excelencia como escritora la hacen una referencia constante para los que se interesan en la materia y en especial en las escritoras latinas/chicanas.La poesía de Corpi es altamente sensual. Su lenguaje es delicado y coloca cada palabra en un encaje lingüístico que fluye con mucha suavidad y con un ritmo que invita a sentir el viento entre los versos.

En esta ocasión me he enfocado en el poemario Variaciones sobre una tempestad.Los poemas aquí seleccionados son apenas una mínima muestra de su elegante uso del lenguaje.Corpi, como las grandes poetas, se deja ir en las páginas y nos arrastra a través de la lectura. Habla de ritos, zanjas de luz, murmullos de alas y conjuros de semillas de fuego. Quién no quiere sentir el batir de las alas o el vibrar de las semillas de fuego.Otra de las características de la poesía de Corpies que escribe en español y eso la hace también pionera y un grato recordatorio de la gran gama de poetas estadounidenses.Le gusta experimentar y juega con los espacios en la hoja de papel traduciéndola a una poesía concreta.

Los grandes temas de la poesía están presentes en sus versos. La finitud, el amor, la nostalgia, la soledad,la pérdidasaltan en sus poemas.La poeta deslava el recuerdo de la piel de sus propios labios o está consciente de que de ella quizá quedarán tan sólo palabras. La naturaleza es constante en su poesía. Teje redes de palabras con lluvia, mares, noche y rayos de luz haciendo de su texto uno sinestético. A continuación mi selección de poemas, “Catorce”, “Fuga”, “Magia y Rito” y “Once” con sabor a azul, salado y nocturno de Lucha Corpi.

Catorce

Erudita el agua del lago me hablaba
        de potencias
                 y misterios,
y a lo lejos el océano me instaba
        a los dulces 
                 principios de la sangre

El chasquido del rayo
         abría zanjas de luz
                   en tus ojos negros y
                            en la noche
                                     del agua

y en mí nacía la tormenta

 

Fuga

                                             A Norma Alarcón

Cansada de llevar en los ojos
resplandor, muro y silencio
y al oído
un rumor de alas y lluvia,
entre adiós y puerta inesperada
me decidí por el fuego
y en su promesa de agostos oportunos
mi corazón ardió
una noche de invierno.

Crucé la insolente geometría
que tus manos construyeran
en las agrestes latitudes de febrero.

Tu milagrería de tigres al acecho lancé
a la insubordinada ecología del viento.

Lavé el sabor temible de tu piel
de mis labios.

Cautericé motivo, causa y sentimiento.

Borré tu mirada de mi cuerpo.

Y clausuré las puertas de la historia
para no recordar más tu nombre ni mi nombre.

Afuera
en el invierno de los dioses
con mano temblorosa destapé el silencio.

Conjuré las semillas del fuego.
Las sentí palpitar en mis sienes, en mis pechos.
En el espacio abierto de mis dedos eran

        sangre

                trigo

                        y luz de junio.

Eran la noche y sus mil ojos

        crepúsculo

                dolor

                        y canto

y la espiga tendida en el campo

        acantilado

                delta

                        y pez dorado

secretos de estrellas en la arena

        escama

                espuma

                        y sal

y el lamento melancólico de la ballena
anunciando la amplitud ecuánime
de un equinoccio boreal.



Magia y Rito

De mi estadía en esta vida
poco quedará,

me ha dicho una mujer al pasar,

unos cuantos dientes
quizá
una pila de huesos
tal vez
unas cuantas palabras:

La magia y los ritos
le pertenecen ya a la noche
que más allá de la niebla
se abre
como una gran dalia negra
con delirios
de azul y de orquídea



Once

A la flor de fantasía
tu mirada se extiende
como un tapiz verde y ancho
por mi pensamiento.
Tu boca me sabe a azul
un azul salado y nocturno
y tu cara morena es
un verso de carne
que me sale a los labios.

Mas
al filo del alba
cuando la corporación de la carne
cae en bancarrota
y la orgía civilizada de la luz
comienza
tu recuerdo vuelve a ser
un niño con frío
en la negativa del tiempo.




Publicaciones anteriores de esta columna